jueves, 4 de noviembre de 2021

La carta de Policarpo a los Filipenses 12:2 y su problema textual


La carta de Policarpo a los Filipenses 12:2 y su problema textual


No es extraño encontrar en literatura de apologética el emplear la carta de Policarpo en su sección 12:2 para sustentar alguna doctrina acerca de Cristo como podemos apreciar a continuación:

Compendio Portavoz de teología, Paul Enns, Th.M., Th.D., Dallas Theological Seminary, professor and the director of the Tampa Extension, Southeastern Baptist Theological Seminary, 2011


The Popular Encyclopedia of Apologetics: Surveying the Evidence for the Truth of Christianity, Ed Hindson, Ergun Caner, Pg. 123, 2008


Sin embargo, si prestamos atención a dicha sección de la carta, por ejemplo, en la traducción de Phillip Schaff, notaremos que dicho pasaje difiere de manera importante con las citas anteriores:

who shall believe in our Lord Jesus Christ, and in His Father, who "raised Him from the dead."” (Ante Nicene Fathers Vol I, Philip Schaff, pg. 35,36, 2017)

 Como podemos apreciar, en la traducción de Schaff, hallamos la referencia a Cristo como Señor, pero no como Dios. Lo cierto, es que, si deseamos mostrar un panorama completo sobre este caso, existen buenos motivos para dudar que el término “Dios” se hallaba en dicho pasaje acreditado a Policarpo, por ejemplo, una edición crítica de dicho texto nos muestra:

The Apostolic Fathers Greek Texts and English Translations, 3rd edition, edited and translated by Michael w. Holmes after the earlier work of J. Β. Lightfoot and J.  R. Harmer, Pg. 295, 2007

Die Polykarpbriefe, Volumen5 de Ergänzungsreihe zum Kritisch-exegetischen Kommentar über das Neue Testament, Volumen 5 de Kommentar zu den Apostolischen Vätern, Johannes Baptist Bauer, Pg. 95, 1995

Esta edición crítica nos indica que existen importantes manuscritos que omiten dichas palabras. La evidencia fragmentaria (incompleta) que tenemos de esta carta de Policarpo en su idioma original, en griego, no contiene la sección señalada, por lo tanto, en la actualidad, solo poseemos traducciones al latín que a lo mucho, datan del siglo 9 E.C. como evidencia, y estas traducciones, difieren entre sí, mientras Lrmpf contienen la referencia a "Dios", Lovbct carecen de esta (como en la imagen anterior 130). En general, aquellos que han estudiado la transmisión de esta carta, concuerdan en que posee muchos problemas y alteraciones en las traducciones que han llegado a nosotros hoy en día. Lo cierto, es que no hay nada en dicha carta que requiera una identificación con Dios, y como Foster nos aconseja, lo más sensato, es asumir que estamos ante el caso de una añadidura o interpolación.


Studies on the Intersection of Text, Paratext, and Reception
, Paul Foster is Professor in New Testament Language, Literature & Theology at the University of Edinburgh, pg. 294, 2021

Este análisis va en la misma linea de algunas citas de los Cristianos de Primeros siglos:
https://labibliaysumensaje.blogspot.com/2021/07/la-apologia-de-aristides-y-su-problema.html

miércoles, 20 de octubre de 2021

Isaías 40:20 ¿Sustenta que la tierra sea plana?

 Isaías 40:20 ¿Sustenta que la tierra sea plana?

Hace un par de semanas me encontré con un video en el cual unas personas que sostenían la idea de que la tierra es plana, y algo que me llamó la atención es que trataban de sostener esta idea basados en el siguiente texto con el siguiente argumento:

 El está sentado sobre el círculo de la tierra, cuyos moradores son como langostas; él extiende los cielos como una cortina, los despliega como una tienda para morar.” (RV-1960)

   BHS   הַיֹּשֵׁב֙ עַל־ח֣וּג הָאָ֔רֶץ וְיֹשְׁבֶ֖יהָ כַּחֲגָבִ֑ים הַנּוֹטֶ֤ה כַדֹּק֙ שָׁמַ֔יִם וַיִּמְתָּחֵ֥ם כָּאֹ֖הֶל לָשָֽׁבֶת׃

 Argumento:

 “Hay una diferencia entre un círculo y una bola [esfera]…, exactamente, si buscas en el hebreo original, significa disco.”

Es cierto, que un círculo y una bola o una esfera no son el mismo objeto desde el punto de vista de las categorías actuales, y que en hebreo el término ח֣וּג sí se puede traducirse como disco o círculo. El problema comienza si prestamos atención a la misma palabra ח֣וּג , si buscamos esta palabra en un diccionario de Hebreo estándar, por ejemplo en el de Gesenius encontraremos lo siguiente:

 


Gesenius's Hebrew and Chaldee lexicon to the Old Testament scriptures, pg. CCLXXIII, 1860

Como apreciamos, ese mismo término hebreo, se puede traducir también como esfera o bóveda o términos semejantes que impliquen alguna curvatura. Unos diccionarios de hebreo presentarán ideas similares, otros como el HOL no presentarán todas estas posibilidades y se alinearán con la idea de la tierra plana, sin embargo este mismo diccionario nos presenta una mejor forma de expresar dicha posición, no simplemente como un círculo, sino con un término mas preciso, literalmente, el de "tierra plana":


En cuanto a traducciones de la Biblia en este pasaje, podemos encontrarnos toda una variedad de términos empleados: círculo, orbe, bóveda, disco, horizonte, globo, arco, cúpula, esfera, redondez, etc.

Usos semejantes de ח֣וּג como bola, pelota en Job 22:14, implicando necesariamente una circunferencia completa: 
"Te echará a rodar con ímpetu, como a bola por tierra extensa; allá morirás..." (RV-1960)
"Te hará rodar como pelota, y te lanzará a una tierra inmensa. Allí morirás..." (NVI)
"Sin falta te enrollará bien apretado, como una pelota, y te lanzará a una tierra espaciosa. Allí morirás..." (TNM 2019)

¿Cómo se dice esfera/bola en hebreo?

 Si realizamos una investigación sobre estos términos, notaremos que no existe un término específico para esfera y otro diferente para círculo (curiosamente, si existe un término específico para círculo y otro diferente para tierra plana), y es en esta ambigüedad donde recae el problema, si un hebreo quiere decir que algo es un círculo, o que algo es una esfera, empleará los mismos términos para describirlos, lo único seguro que denotan este y otros términos desde el punto de vista del idioma, es que hacen referencia a alguna forma u objeto curvo.

miércoles, 1 de septiembre de 2021

Exegesis Hechos 5:3,4 ¿Es el Espíritu Santo, Dios ontológica o funcionalmente?

 

Exegesis Hechos 5:3,4 ¿Es el Espíritu Santo, Dios ontológica o funcionalmente?


Es bastante común encontrarnos en libros de teología sistemática y comentarios apologéticos este pasaje bíblico interpretado como prueba de la Deidad del Espíritu Santo:

Teología sistemática: Un estudio profundo de la doctrina bíblica, John MacArthur, 2018

Biblia de Estudio de Apologética, editorial Holman, Pg. 1485, 2011

A continuación, en este artículo, analizaremos de manera mas profunda dichos pasajes y afirmaciones, comencemos teniendo en cuenta que esta sección del relato, tiene un paralelo semántico, por ejemplo, con los siguientes pasajes bíblicos:

“… y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles… Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.” (Hechos 5:2,3,4 RV 1960)

“Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Moisés y Aarón en el desierto; … ¿qué somos, para que vosotros murmuréis contra nosotros?... Dijo también Moisés: Jehová os dará en la tarde carne para comer, y en la mañana pan hasta saciaros; porque Jehová ha oído vuestras murmuraciones con que habéis murmurado contra él; porque nosotros, ¿qué somos? Vuestras murmuraciones no son contra nosotros, sino contra Jehová.” (Éxodo 16:2,7,8 RV 1960)

“y le dijeron: He aquí tú has envejecido, y tus hijos no andan en tus caminos; por tanto, constitúyenos ahora un rey que nos juzgue, como tienen todas las naciones… Y dijo Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan; porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado, para que no reine sobre ellos.” (1 Samuel 8:5,7 RV 1960)

También esta misma semejanza queda muy marcada en los evangelios:

“El que recibe en mi nombre a uno de estos niños me recibe a mí; y el que me recibe a mí no me recibe a mí, sino al que me envió.” (Marcos 9:37 NVI)

En los primeros tres pasajes, podemos apreciar, de manera evidente que se realiza una acción en contra de Moisés, Arón, Samuel, los apóstoles, Espíritu Santo, etc. Debemos tomar en cuenta que, en estos casos, tenemos una hipérbola (“No has mentido a los hombres”, “Vuestras murmuraciones no son contra nosotros”, “no te han desechado a ti), que es un recurso literario de exageración el cual le sirve al escritor para enfatizar y preparar el escenario para lo que la cual, no se espera que deba ser tomada literalmente. En otras palabras, Ananías sí mintió a los hombres que representaban a Dios, de la misma manera que una acción fue ejecutada en contra de los siervos de Dios en los otros pasajes.

Constructing Jesus, Memory, Imagination, and History, Dale C. Allison Jr. is Princeton Theological Seminary’s Richard J. Dearborn Professor of New Testament, pg. 105, 2010

¿Qué implica ir en contra de los representantes de Dios?

Realizar una acción negativa contra cualquiera de estos personajes era equivalente a realizarla contra Dios; pero esto no tiene por qué implicar que estos personajes tengan que identificarse con Dios literalmente. La mentira de Ananías no estaba enmarcada puramente en un asunto seglar o cotidiano, sino espiritual, dado que involucraba a los agentes y las cosas de Dios. Funcionando dicho espíritu, como el agente de Dios, de la misma manera que los profetas u otros personajes, funcionan como agentes en los otros pasajes.

“The phrase in 5:4, “lied not to us,” does not literally mean that Ananias has not lied to Peter, but rather that the far more important issue, which Ananias has not realized, is that he has lied to God. This semantic construction may echo biblical prophets.[160] Lying to the Holy Spirit (Acts 5:3) is identified with lying to God (5:4). In an early Jewish context, the Spirit could be understood as God’s activity or agency;” Acts: An Exegetical Commentary : Volume 2: 3:1-14:28, Craig S. Keener (PhD, Duke University) the F. M. and Ada Thompson Professor of Biblical Studies at Asbury Theological Seminary in Wilmore, Kentucky, 2013

¿El escenario mas probable? Si sustituimos ‘Espíritu Santo’ por ejemplo con otro personaje como un profeta, un ángel, un apóstol, el sentido del pasaje no cambia, seguimos teniendo a un agente de Dios y cualquier cosa que hagamos contra este agente, es como si se la hiciéramos a Dios. En este caso la única relación que requiere este contexto es la de agencia o representación.

Empowered Believers: The Holy Spirit in the Book of Acts, Gonzalo Haya-Prats, ha sido profesor y director del Departamento de Teología en la Universidad del Norte de Chile, pg. 87, 2011

El empleo de la identidad funcional no es extraño en el libro de Hechos, como ejemplo podemos encontrar este caso en el capítulo 9:1-4, donde se expresa que la persecución que realizaba Saulo a los cristianos era funcionalmente equivalente a perseguir a Jesús. Esta persecución no puede tomarse personal u ontológicamente, puesto que implicaría, que todos los cristianos a los cuales Saulo persiguió, eran la persona de Jesús. Desconozco que en el libro de Hechos se emplee identidad cualitativa, también desconozco la existencia de algún análisis del pasaje que concluya que se refiere al sentido cualitativo, estos son motivos por los cuales descarto esta posibilidad.

Establecer otro tipo de identidad, como identidad personal o cualitativa, requiere un planteamiento exegético del caso, no he encontrado en ningún comentario un planteamiento de estas posibilidades que vayan mas allá de la presuposición. Si la conversación que involucra la mentira, hubiese sido personalmente entre Ananías y el espíritu santo, sin darse directamente con apóstoles primero, creo que sí hubiese sido sugerente de identidad personal, este no es el caso, la referencia al espíritu santo en el pasaje es una consecuencia derivada del trato con Pedro y/o los apóstoles. 

Es notable también que en 5:9 la referencia al espíritu no es directamente a "Dios", o a el "espíritu Dios," como esperaríamos como consecuencia de una identidad personal, sino que tenemos un artículo neutro τὸ concatenado a un sustantivo neutro πνεῦμα a su vez concatenado a un genitivo de posesión masculino  Κυρίου "espíritu de Dios". Para quienes prefieran tomar al espíritu en cuestión como una personificación de un atributo de Dios en 5:3, la construcción sintáctica en 5:9 sugiere que el espíritu en cuestión no se trata de una persona apoyando el caso, ya que no se encuentra en ninguna de las obras de Lucas, ni en las de Pedro este tipo de construcción en referencia a una persona, o al menos yo no conozco ninguna, y de existir en la literatura griega en general, seria muy poco frecuente o excepcional.

En general, ¿Qué fue lo que Lucas quería enseñarnos en estos dos pasajes del relato en los Hechos de los apóstoles?:

Acts paideia Commentaries on the New Testament, Mikeal C. Parsons Professor and Macon Chair in Religion at Baylor University, 2008

Acts of the Apostles (Catholic Commentary on Sacred Scripture), William S. Kurz, SJ, is Professor of New Testament at Marquette University, 2013

ACTS A New Covenant Commantary Part I, Youngmo Cho assistant professor of New Testament studies at Asia LIFE University, in South Korea, Hyung Dae Park Lecturer in New Testament Studies at Ezra Bible Institute for Graduate Studies in Korea, 2019

Comentarios Bíblicos con aplicación Hechos, Ajith Fernando ThM, Fuller Theological Seminary, 2012

Acts, New Cambridge Bible Commentary, Craig S. Keener is F. M. and Ada Thompson Professor of Biblical Studies at Asbury Theological Seminary, pg. 205, 2020

viernes, 9 de julio de 2021

La apología de Arístides, y su problema textual

 La apología de Arístides, y su problema textual

¿Quién fue Arístides?

Lo poco que sabemos sobre este personaje proviene de Eusebio y Jerónimo, los cuales nos dicen, que al parecer era un filósofo ateniense converso al cristianismo en el siglo II, el cual escribió una apología la cual fue presentada a los emperadores Adriano y Antonio Pio.

¿Que sabemos del texto de la apología de Arístides?

Se puede decir que existen principalmente tres fuentes importantes del texto, por un lado, la traducción al Siriaco, la traducción al Armenio, y por el otro la copia compuesta en Griego en el texto de Barlaam y Ioasaph. Estos textos difieren de manera significativa uno del otro, incluso, a modo de curiosidad, aquellos que han estudiado ambos textos están de acuerdo en que ambos tienen bastantes problemas de transmisión.

A continuación, presentamos el modelo mas actual que existe sobre su transmisión y las copias que actualmente existe:


(Aristides’ Apology and the Novel Barlaam and Ioasaph, William Alexander Simpson, PhD on Theology, Pg. 76, 2015)

¿Por qué debemos tener cuidado al momento de emplear este texto?

Hace un tiempo atrás encontré en el blog de un teólogo un artículo donde se hacía una referencia a la apología de Arístides para intentar fundamentar un dogma teológico, lo interesante es que este empleaba solamente una cita de la traducción al Siriaco, e inmediatamente me pregunté, ¿Por qué alguien abría de utilizar una traducción al Siriaco siendo que Arístides escribió en griego, es que no tenemos ningún ejemplar en griego? Y evidentemente, tras investigar un poco encontré que, si tenemos una, y como es de esperarse, dicho texto era muy diferente a la versión Siriaco en la sección en cuestión, y no apoyaba el punto que el teólogo intentaba fundamentar. Revisemos el problema textual:

SIRIACA

GRIEGA

“The Christians, then, trace the beginning of their religion from Jesus the Messiah;

 and he is named the Son of God Most High. And it is said that God came down from heaven,

 

and from a Hebrew virgin assumed and clothed himself with flesh; and the Son of God lived in a daughter of man.”

“Now the Christians trace their origin from the Lord Jesus Christ.

And He is acknowledged by the Holy Spirit to be the son of the most high God, who came down from heaven for the salvation of men.

And being born of a pure virgin, unbegotten and immaculate, He assumed flesh and revealed himself among men that He might recall them to Himself from their wandering after many gods.”

(THE APOLOGY of ARISTIDES THE PHILOSOPHER TRANSLATED FROM THE GREEK AND FROM THE SYRIAC VERSION, D. M. KAY, pg. 511,508)

Como apreciamos hay bastantes diferencias entre ambos textos, es interesante, por ejemplo, que la traducción al Siriaco y la composición al Griego difieren en la referencia al espíritu santo, y es curioso que tanto la traducción al Armenio como la composición del Griego, (incluso siendo que provienen de antecesores textuales diferentes, ver el esquema), tienen en común la cita al espíritu santo, en contraste con la versión Siriaca que tiene el mismo antecesor que la Armenia. Dicha cita se considera una expansión al texto, en general se considera que dicha expansión se hizo reproduciendo la teología considerada ortodoxa posterior al cuarto siglo*. Otra diferencia es que, las traducciones Siriaca y Armenia dan a entender que fue “Dios” quién bajo del cielo en contraste con la composición Griega la cual carece de dicha implicación. De la misma manera que la referencia al espíritu santo puede considerarse este caso también como una adición tardía al texto, es razonable concluir que la referencia a “Dios” en dicha sección de las traducciones sea también una adición expandiendo y expresando una composición desde el punto de vista personal del copista/traductor de dicho texto (recordemos que esto es algo que sucedió en los escritos de los cristianos pre-nicenos, por ejemplo con el caso de la composición de Rufino sobre las obras de Orígenes). ¿Por qué alguien añadiría una referencia al espíritu santo y quitaría la referencia a la deidad de Cristo? Simplemente, no hay argumentos para sostener que la referencia a "Dios" bajando del cielo haya sido eliminada de la composición Griega y concluimos que esta referencia es un añadido posterior al texto. En general, parece no existir un texto lo suficientemente estable para estos casos.

Debemos tener mucho cuidado y presentar la información de manera completa, especialmente en casos como este en el cual existen diversas variantes textuales de peso al momento de tratar de fundamentar nuestra teología.

*“This may suggest the Armenian and Greek have gone through a post-fourth century redaction to include the reference to the Holy Spirit.” (Aristides’ Apology and the Novel Barlaam and Ioasaph, William Alexander Simpson, PhD on Theology, Pg. 168, 2015)

jueves, 3 de junio de 2021

¿Juan 8:58 hace una cita de Éxodo 3:14?

 

¿Juan 8:58 hace una cita textual de Éxodo 3:14?

El hecho de que exista una relación entre estos dos pasajes es una idea muy popular, sin embargo, aquellos que coinciden con esta, difícilmente presentan algún tipo de evidencia que sostenga dicha afirmación, por ejemplo, como vemos a continuación:


Después de leer todo el artículo escrito por Allin, mi pregunta inmediata fue, ¿Y qué es lo que sustenta que 3:14 sea una cita textual de 8:58? La respuesta no se encuentra en su artículo, ni en muchos otros que he leído al respecto.

De hecho, si buscamos en el Texto Crítico Nestle-Aland 28, y prestamos atención a las referencias cruzadas de Juan 8:58, tenemos lo siguiente:


Como apreciamos, no hay ninguna referencia que nos lleve a la cita Éxodo. Y esto no es un descuido, las referencias y notas de la versión 28 de este texto crítico fueron revisadas para esta nueva versión (cabe destacar que en la versión 27, tampoco se presenta a Éxodo 3:14 como una referencia).

 De ahí que es razonable cuestionar si realmente existen motivos sólidos para concluir si Juan 8:58 estaba citando Éxodo 3:14.

 Comencemos revisando la evidencia textual, como sabemos, éxodo fue escrito en hebreo, y posteriormente, fue traducido al griego, de ahí que tengamos la siguiente traducción al griego en la Septuaginta antigua:

καὶ εἶπεν ὁ θεὸς πρὸς Μωυσῆν Ἐγώ εἰμι ὁ ὤν· καὶ εἶπεν Οὕτως ἐρεῖς τοῖς υἱοῖς Ισραηλ Ὁ ὢν ἀπέσταλκέν με πρὸς ὑμᾶς. (Exod. 3:14 LXXRH)

 εἶπεν αὐτοῖς Ἰησοῦς· ἀμὴν ἀμὴν λέγω ὑμῖν, πρὶν Ἀβραὰμ γενέσθαι ἐγὼ εἰμί. (Jn. 8:58 NA28)

Sin embargo, no todos están de acuerdo que esta sea una traducción literal del hebreo, también se puede tomar como una interpretación platónica de esta, como Vasileiadisº nos presenta en una investigación muy detallada (sugiero leer todo su artículo, ya que se expone mucha más información relevante al tema y está disponible en el link después de la cita):


https://www.academia.edu/39912588/_Exodus_3_14_as_an_explanation_of_the_Tetragrammaton_What_if_the_Septuagint_rendering_had_no_Platonic_nuances_Το_Έξοδος_3_14_ώς_ερμηνεία_του_Τετραγράμματου_Πώς_θα_μπορούσε_να_ήταν_η_απόδοση_τής_Εβδομήκοντα_αν_δεν_είχε_πλατωνική_χροιά_Biblische_Notizen_Nr_183_2019_pp_101_128

Luego en su estudio nos presenta mas evidencia, al resaltar que otras traducciones del Hebreo al Griego como la versión de Aquila y Teodoto no vierten esa porción como ‘ego eimi’ sino como Ἔσομαι Ἔσομαι, al parecer ‘ego eimi’ no era necesariamente la única forma de entender y/o traducir dicho pasaje para los judíos que vivieron alrededor de la época del NT (de la misma manera, si ‘ego eimi’ hubiese sido un nombre conocidísimo de Dios para los judíos en dicha época, ¿porque evitarlo o  descartarlo tan fácilmente de su  traducción?) esto nos lleva a cuestionar si necesariamente alguien que deseara hacer una referencia al pasaje en cuestión de éxodo, emplearía ‘ego eimi’. Sumando a esto, no parece ser que ego eimi sea una combinación de palabras reservada y exclusiva para Yahweh/Jehová, ya que es ampliamente usada por los escritores Bíblicos de manera indistinta, ver el siguiente artículo:

https://www.academia.edu/44315324/Jesus_s_Egō_eimi_I_am_sayings_in_the_GJohn_Why_there_is_no_connection_with_the_Being_of_Ex_3_14_LXX_and_other_I_am_phrases_in_the_Hebrew_Scriptures_Τα_Ἐγώ_εἰμι_λόγια_του_Ιησού_στο_ΕυΙωάννη_Γιατί_δεν_έχουν_καμία_σχέση_με_τον_Ὄντα_της_Εξόδ_3_14_Ο_and_άλλες_Ἐγώ_εἰμι_φράσεις_των_Εβρ_Γραφών

En general, se puede decir que no hay un consenso al respecto, mas allá de que 8:58 presenta una afirmación elevada de Jesús, cuan elevada es lo discutible: 

"(8:58). El significado exacto de esta afirmación es objeto de debate, pero es pertinente y suficiente señalar aquí que constituye una enseñanza elevada sobre la afirmación de Jesús acerca de sí mismo..." (The Portrayals of the Pharisees in the Gospels and Acts, Mary Marshall is Departmental Lecturer in New Testament Studies at the University of Oxford, pg. 211, 2014)

Por otro lado, Surls* analiza el contexto de Juan 8:58 y concluye que si Jesús hubiese querido hacer referencia al pasaje de Éxodo no hubiese empleado solo la mitad de la fórmula que se nos presenta en dicho texto, sino la fórmula completa:


Algo más que el contexto señala, es la referencia contextual explícita a Abrahán en 8:58, en el contexto de 3:14 tenemos a Moisés, mientras en 8:58 tenemos a Abrahán, el contexto es diferente. Estos puntos son más que suficientes motivos que llevan a Surls y a otros a descartar una relación entre esos dos textos, lo cual tiene mucho sentido.


Jesus in John's Gospel, William (Bill) Loader, Emeritus Professor of New Testament at Murdoch University, 2017


 Otros, deciden apelar a la reacción que tuvieron los líderes judíos para tratar de sustentar una conexión entre ambos textos como vemos a continuación:

“Los líderes judíos reconocieron de inmediato que él no estaba hablando en acertijos o cosas sin sentido. Cuando él dijo «Yo soy» estaba repitiendo las mismas palabras que Dios usó para identificarse a sí mismo ante Moisés... Cuando los judíos oyeron esta declaración solemne y enfática, supieron que él estaba afirmando ser Dios. «Entonces los judíos tomaron piedras para arrojárselas, pero Jesús se escondió y salió inadvertido del templo» (Jn 8:59).” (Teología Sistemática de Grudem: Introducción a la doctrina bíblica, Wayne A. Grudem, 2012)

Lo cierto es que no hay ninguna explicación de qué fue lo que entendieron estos líderes judíos en el relato, de ahí que la razón presentada, no necesariamente tenga que ser la única posibilidad, e incluso si decidimos asumir que la reacción de estos se debió a que entendieron que Jesús se autoproclamaba el Dios de Israel, no hay manera de sostener que estos entendieron de manera correcta lo que Jesús quiso decir, como sucedía  comúnmente en otros relatos en los que estos líderes donde estos malinterpretan las palabras y acciones de Jesús. Tratar de encontrar una respuesta en pasajes como 10:30-33, no necesariamente es una buena solución, si bien el que tomaran piedras para apedrear a Jesús relaciona estos dos pasajes, nada requiere que se trate del mismo motivo, puesto que el desarrollo de ambos relatos, no es el mismo (preexistencia VS labor pastoral). Tampoco este relato pertenece a las unidades en análisis desde el punto de vista exegético, y  se requeriría una lectura en reversa, al tratar de leerse 10.31 en 8.59 lo cual es poco natural y de la misma manera que en 8, la reacción de los judios en 10 puede interpretarse de diferentes maneras, no hay un consenso al respecto.

"De hecho, en todos estos pasajes probablemente debemos tomar las acusaciones de los judíos como distorsiones de lo que los lectores del Evangelio de Juan esperan tomar como cierto. Esto es más obvio por el cargo de que "Jesús tiene un demonio"" (LORD JESUS CHRIST, Devotion to Jesus in Earliest Christianity, Larry Hurtado, fue Profesor emérito de Lenguaje del Nuevo Testamento, Literatura y Teología en la Universidad de Edinburgh, pg. 404, 2003)

Por otro lado, desde el punto de vista del codice Egerton, Zelyck discute razones por las cuales podrían haber tenido razones para apedrearlo a continuación:

“Existen numerosas violaciones de la Ley que son castigadas con la lapidación: apostasía (Lev 20:2; Deut 13:11; 17:5); blasfemia (Lev 24:14, 16, 23); hechicería (Lev 20:27); violación del sábado (Num 15:35–36); un hijo desobediente (Deut 21:21); y transgresiones sexuales (Deut 22:21). Es posible que la lapidación en 1r sea el resultado de un supuesto comentario blasfemo de Jesús al final de 1v,9, ya que ambos intentos de apedrear a Jesús en el Nuevo Testamento probablemente sean el resultado de la acusación de blasfemia (Juan 8:59; 10:31–33). Sin embargo, Watson puede tener razón al señalar que las hostilidades hacia Jesús pueden haber sido por blasfemia al afirmar "autorización mosaica para sí mismo" en 1v.19–20, y por una violación del sábado como una sanación (Juan 5:9–16; 9:14–16), que pudo haber ocurrido antes de 1v y haber llevado a la declaración de Jesús en 1v.1–5. La laguna al final de 1v hace imposible determinar si Jesús realmente dijo algo considerado blasfemo; simplemente afirmar 'autorización mosaica' no conduce a intentos de quitarle la vida a Jesús al final de Juan 5. Por lo tanto, el intento de apedrear a Jesús probablemente está relacionado con la acusación de que es un transgresor de la ley (1v.1–5), y no logró convencer a sus oponentes de lo contrario al afirmar que Moisés y las Escrituras predijeron su venida (1v.17–26). Esta interpretación también se alinea con evidencia temprana de que los cristianos eran apedreados como transgresores de la ley. Por ejemplo, Josefo señala que el sumo sacerdote Ananías (el más joven) 'convocó al Sanedrín de jueces y les presentó al hermano de Jesús, llamado Cristo [posiblemente una redacción posterior], cuyo nombre era Jacobo, y a otros; y, después de formular acusaciones contra ellos como transgresores de la Ley (παρανομησντων), los entregó para ser apedreados (παρδωκε λευσθησομνους)' (Josefo, Ant. 20.200).” (The Egerton Gospel (Egerton Papyrus 2 + Papyrus Köln VI 255) Introduction, Critical Edition, and Commentary, Lorne R. Zelyck is Associate Professor of Biblical Studies, St Joseph's College, pg. 116, 117, 2019)

Tal vez, también se puede explorar el hecho de que estos decidan apedrearlo desde el punto de vista de Deuteronomio 13:1-10 donde también podría explicarse que veían a este como un profeta que ejecuta milagros para otra deidad, lo cual, requiere que se le apedree.

Otros que deciden tomar este pasaje como un absoluto en referencia a una forma de expresarse divina del AT (y pese a que tampoco explican como llegan a esa conclusión), son bastante cautos en cuanto al marco que lo rodea y no llegan a desarrollar estas implicaciones mas allá de lo siguiente:

"Al principio de este discurso, Jesús dice dos veces a las multitudes que deben creer "que yo soy "o que creerán" que yo soy "o" yo soy él "cuando lo levantaron (Juan 8: 24,28); donde "yo soy" se traduce ego eimi). Curiosamente, en esos lugares, cuando Jesús usa el absoluto "yo soy", no se le acusa de blasfemia, ni nadie busca apedrearlo. Allí la única respuesta es la perplejidad. No es hasta que Jesús promete que quien cree en él "nunca gustará la muerte" (vv. 51-52) y afirma haber existido antes de que Abraham existiera (8:58) que alguien trata de apedrearlo. Porque con estas afirmaciones Jesús afirmó que puede dar la vida eterna porque participa de ella, y es la participación de Jesús en la vida eterna de Dios lo que se expresa en la afirmación "Antes que Abraham fuera, yo soy". Como indica la respuesta de "los judíos" , no es menos blasfemo que hacerse igual a Dios (5:18, 10:33). Esta declaración culminante de Jesús revela lo que está en juego al creer "que yo soy" (8: 24,28) ." (John, A Commentary, Marianne Meye Thompson, Senior Professor of New Testament Interpretationin at Fuller Theological Seminary, 2015)


CONCLUSIÓN

La falta de fundamento para establecer que Juan 8:58 contenga una cita de Exodo 3:14, sumada a la incertidumbre su traducción al griego, la existencia de diferentes contextos entre ambos pasajes y el hecho de que solo se estaría citando parcialmente la frase de 3:14, me llevan a descartar o a ver como improbable la existencia de una referencia para este caso.

º Biblische Notizen. Neue Folge 183, Exodus 3:14 as an Explanation of the Tetragrammaton: What if the Septuagint Rendering had no Platonic Nuances?, Pavlos D. Vasileiadis, Professor at the Department of Theology of the Aristotle University of Thessaloniki, pg. 113, 2019.

* MAKING SENSE OF THE DIVINE NAME IN THE BOOK OF EXODUS: FROM ETYMOLOGY TO LITERARY ONOMASTICS, Austin Surls, Profesor Asociado de Estudios Bíblicos en el Wheaton College, B.A. (Biblical Languages), M.Div., M.A. (The Bible and the Ancient Near East), The Hebrew University of Jerusalem, Pg. 306, 2015.


viernes, 12 de febrero de 2021

MONOTEISMO EN EL CONTEXTO JUDIO Y CRISTIANO DE TIEMPOS BIBLICOS

MONOTEISMO EN EL CONTEXTO JUDIO Y CRISTIANO DE TIEMPOS BIBLICOS


En esta ocasión me gustaría compartir con todos una buena porción del libro de Fredriksen que estoy leyendo actualmente, en particular la sección sobre el tema del monoteísmo el cual nos da una mirada fresca (el libro es del 2018) y nos presenta desde un punto de vista académico, cómo funcionaba el monoteísmo de tiempos bíblicos tanto como para judíos como para cristianos, el cual es complementado con extractos de otros académicos enfocados al estudio de los orígenes de cristianismo o cristianismo de 1er siglo.

“Los dioses paganos del Nuevo Testamento se vuelven fácilmente invisibles para los lectores modernos. La mayoría de los lectores, si son teístas, son monoteístas, convencidos de que solo existe un dios. Pero en la antigüedad, incluso para los antiguos "monoteístas", todos los dioses existían. Mire Éxodo, por ejemplo, o Salmos, o Jeremías. Incluso en su propio libro, Dios no era el único dios*.

* El dios de Israel pelea con los dioses egipcios, Éxodo 12.12; Dios es el dios más grande, Salmo 86.8; y todos los demás dioses se postraron ante él, Salmo 97.7; también Jeremías 10.6. Para más información sobre el universo congestionado por dioses del antiguo  “monoteísmo,” Fredriksen, Pagans’ Apostle, 10–13, 38–42; también Fredriksen, “How Jewish Is God? Divine Ethnicity in Paul’s Theology.” Ver también Emma Wasserman, “Gentile Gods at the Eschaton: A Reconsideration of Paul’s ‘Principalities and Powers’ in 1 Corinthians 15.” Para las aluciones de Pablo a dioses extranjeros, ver también James D. G. Dunn, The Theology of Paul the Apostle, 33–38, 104–10.

Lo que distinguía a los antiguos monoteístas, ya fueran paganos, judíos o eventualmente cristianos, de sus contemporáneos no monoteístas era su convicción de que un solo dios era supremo sobre todos los demás dioses inferiores. El cielo, incluso para los "monoteístas", seguía estando muy poblado. Su estructura de poder es lo que definió al antiguo monoteísmo: un solo dios estaba en la cima. Pero muchas otras deidades menores, también para los judíos, así como para los paganos y, eventualmente, para los cristianos, se ubicaron por debajo…

Pablo ya nos ha presentado a algunos de estos dioses, allá por 1 Corintios 15, cuando habló de estrellas y planetas, el sol y la luna, todos los cuales, en la antigüedad, rodeaban la tierra. Y en ese mismo capítulo también mencionó a esos agentes astrales, los gobernantes, las autoridades y los poderes, a quienes el Cristo que regresara victorioso abrumaría. Los paganos concibieron estos elementos y fuerzas cósmicas como formas de vida inteligente, inmortales y en ese sentido divinas. Los judíos estuvieron de acuerdo. Como dijo Filón de Alejandría, el contemporáneo mayor de Pablo, en su erudito comentario sobre el Génesis, el firmamento del cielo es "la morada santísima de los dioses manifiestos y visibles". Para Filón, no menos que para sus vecinos paganos, las estrellas y los planetas eran dioses. Todavía llamamos a estas estrellas y planetas por sus antiguos nombres divinos: Mercurio, Venus, Júpiter, Saturno. Más cerca de la tierra vivían aún más dioses. El Salmo 95.5 en griego había descartado a estas deidades próximas como "dioses"; "Los dioses de los paganos son demonios" —daimonia, pequeños dioses, es decir— todavía poderes divinos, pero también subordinados, en opinión del salmista, a su propio dios, el dios de Israel.

La ira de estos dioses inferiores solo hizo que Pablo fuera más desafiante. Se queja a los corintios de que "el dios de este siglo" ha cegado los ojos de los incrédulos. Él desprecia como pesos ligeros cósmicos los "elementos del universo" que sus ex paganos en Galacia habían adorado anteriormente. Los dioses paganos, le dice a su asamblea de Corinto, son meros daimonia, "demonios" o "dioses". “Todos sabemos que hay muchos dioses y muchos señores”, les comenta, “pero para nosotros hay un solo dios, el Padre. . . y un señor, Jesucristo”. Además, Pablo y sus comunidades sabían algo que sus vecinos paganos y judíos no afiliados no sabían: pronto, muy pronto, Cristo regresaría para combatir estas fuerzas cósmicas de una vez por todas…”

When Christians Were Jews: The First Generation, Dr. Paula Fredriksen, is Aurelio Professor of Scripture emerita at Boston University, Distinguished Visiting Professor of Comparative Religion at the Hebrew University, Jerusalem, pg. 147-153, 2018

Deberíamos estar consientes, al menos que existen diferentes tipos o conceptos de monoteísmo en el marco cultural de tiempos bíblicos como se presenta a continuación:

"Además de la importancia de distinguir posibles comprensiones de la(s) relación(es) entre el monoteísmo judío y cristiano temprano, también es importante señalar los "tipos de monoteísmo" que han sido y pueden ser identificados y distinguirse como existentes durante este período.

-MONOTEÍSMO RETÓRICO

-MONOTEÍSMO DE CREACIÓN

-MONOTEISMO LITÚRGICO (MONOLATRÍA)

-MONOTEISMO INCLUSIVO O EXCLUSIVO?"

The Only True God, Early Christian Monotheism in Its Jewish Context, James F. McGrath, is the Clarence L. Goodwin Chair in New Testament Language and Literature at Butler University in Indianapolis in the United States, 2022 

A modo de complemento, de manera similar:

"As with the discussion of Judaism above, so with the Shema. The problem is not that Paul ever voices any doubts about the oneness of God; he does not. In fact, he pointedly affirms it. The problem, if there is one, is that Paul also says some things about Jesus that later interpreters have thought should have made Paul balk at confessing the Shema. According to these interpreters, Paul himself may not have recognized that he had abandoned monotheism, but he had in fact abandoned it. A key text here is Paul’s third express citation of the Shema, where he is answering the question whether it is permissible for gentiles-in-Christ to eat meat that had previously been sacrificed to idols (1 Cor 8:4–6).

On the one hand, Paul here once again affirms Deuteronomic orthodoxy (“there is no god but one”) but, on the other hand, he also concedes the existence of many other gods and lords. On the surface of it, this is confusing, not to say contradictory. But there is a logic to it. Paul says that idols, that is, the cult statues of gentile deities, are nothing at all. But the deities themselves do exist, as he reaffirms at the end of his discourse on idol sacrifices: “What [gentiles] sacrifice, they sacrifice to demons and not to God” (1 Cor 10:20). Unlike idols, Paul reckons, demons, gods, and lords are real things in the cosmos.

What is more, one of these other lords, namely Jesus, Paul also adds to his formulaic confession of divine oneness: “For us there is one god the father … and one lord Jesus Christ.” Paul calls Christ a lord, not a god, which is interesting and perhaps significant (see further below), but God does at least now have a divine lieutenant, the messiah Jesus. The phrase “for us” signifies that here Paul is talking about devotion, not ontology. The point, in other words, is not that no other divine beings exist except God and Christ, but rather that only God and Christ are worthy of devotion from Paul and his co-religionists. Gentiles in their natural state may sacrifice to demons, but “for us” there is only God and Christ. This is what is often called monolatry (as opposed to monotheism) in the secondary literature. If monotheism means belief in the existence of only one divine being and no others,47 monolatry means the reservation of worship for one divine being, even if other divine beings may exist. Monolatry is often (but need not be) coordinated with henotheism—that is, belief in the existence of a pyramid of divine beings with one higher than all the rest. These additional terms give us access to very helpful distinctions, but unfortunately, many scholars (not to mention laypeople) do not avail themselves of these distinctions. Many persist in using just the one word “monotheism” for a number of quite different phenomena. Or they create their own bespoke distinctions, such as William Horbury’s distinction between exclusive monotheism (which denies the existence of all gods but one) and inclusive monotheism (which allows that other gods exist but ranks them below the high god), or Angelos Chaniotis’s distinction between monotheism (only one god exists) and megatheism (one god is experienced as superior to all others).50 Ideally, when discussing these complicated matters, we should be maximally precise while also using terms that are intelligible to the largest possible number of people. Along these lines, we might say that, in 1 Corinthians 8, Paul starts by striking an apparently monotheistic note (“there is no god but one”), but as he goes on it emerges that his position is perhaps better described as henotheistic and monolatrous (or, perhaps better, duolatrous): There are many gods and lords in the cosmos, but one father god is above them all, and only he and his son the messiah are worthy of devotion in Paul’s assemblies." (Paul, Then and Now, Matthew V. Novenson is senior lecturer in New Testament and Christian origins at the University of Edinburgh, where he is also director of the Centre for the Study of Christian Origins, 2022)




Confronting Old Testament Controversies: Pressing Questions about Evolution, Sexuality, History, and Violence, Tremper Longman III (PhD, Yale University) is Distinguished Scholar and Professor Emeritus of Biblical Studies at Westmont College in Santa Barbara, California where he was the Robert H. Gundry Professor of Biblical Studies for nineteen years before his retirement. Before Westmont, he taught at Westminster Theological Seminary in Philadelphia for eighteen years, pg. 59,82, 2019

"Aunque se ha hablado mucho del llamado monoteísmo supuestamente popular entre los paganos del mundo grecorromano, esto debe distinguirse del tipo de monoteísmo del judaísmo y el cristianismo... Siendo este el caso, sugiero que en los intereses de precisión histórica y comunicación clara, el término "monoteísmo" debe usarse sólo para describir la devoción a un dios y el rechazo del panteón de deidades como fueron reverenciadas en todo el mundo grecorromano." (One God, One Lord, EARLY  CHRISTIAN  DEVOTION  AND  ANCIENT JEWISH  MONOTHEISM, LARRY W. HURTADO, fue profesor emérito de Lenguaje, Literatura y Teología del Nuevo Testamento en la Universidad de Edimburgo, además de jefe de la Escuela de Divinidad y director del centro de Estudio de Orígenes del Cristianismo., pg. 129, 1998)

Algunos extractos de lo que fue una de sus últimas entrevistas referidas al tema: